viernes, 2 de marzo de 2007

Las uvas de las malas excusas

Para tener una empresa y que funcione, hay que tener talento. Eso se presupone. EL propietario de la empresa donde trabajo tiene un buen ingreso en beneficios. Se supone que tomará decisiones acertadas.

Recientemente, por unos cambios técnicos algunos procesos han quedado imposibilitados. Cuando he preguntado que cuándo vamos a poder utilizarlos de nuevo la respuesta ha sido "No vamos a utilizarlos más. De todos modos no servían de nada."

Me pregunto por qué me he pasado todo este tiempo siguiendo estos procesos si ahora resulta que no servían de nada. Esto se parece a la fábula de Esopo donde la zorra que no sabe cómo alcanzar las uvas se da media vuelta diciendo que están verdes y que no las quiere.